La directiva de la Unión Europea permitirá que el periodo inactivo de las guardias de los médicos no sea considerado tiempo de trabajo, en contra de lo que ha dictaminado el Tribunal de Justicia de la UE.

Los Estados miembros podrán modificar su legislación y permitir que los empleados alcancen acuerdos individuales con los empresarios sobre la duración de la jornada, hasta un máximo de 60 horas semanales en los casos generales y de 65 en casos especiales como los médicos.Este tiempo se computa como promedio durante tres meses, lo cual significa que las jornadas podrán alcanzar hasta las 78 horas semanales.

Alejandro Cercas, eurodiputado socialista, considera que la directiva "supone un grave retroceso que convierte el derecho laboral europeo en un material de usar y tirar". "Es un precedente peligroso", añade, "que luego se puede aplicar a salarios y a condiciones de higiene y abre la puerta al dumping social".

En su opinión, "dejar al trabajador que pacte a solas con el empresario es renunciar a toda la historia legal y de lucha social colectiva".

La Confederación Estatal de Sindicatos Médicos ha advertido que si se aprueba la directiva podría convocarse una huelga en toda Europa.

Los ministros de trabajo de la UE deciden hoy en Bruselas si reforman la directiva que regula la jornada laboral

La actual directiva que rige la jornada laboral, establece un máximo de 48 horas de trabajo semanales, y se pretende cambiarla por otra que no compute en su integridad el tiempo de guardias, lo que conllevaría, de facto, rebasar dicho límite de dedicación. Las modificaciones fundamentales que se quieren introducir consisten en algo tan equívoco como considerar tiempo “inactivo” los períodos de guardia en que no se realice una actividad asistencial directa, así como facultar a las empresas para que lleguen a acuerdos generales o particulares con los médicos que permitan hacer excepciones (mediante la cláusula bautizada como op-out) a la actual normativa.

Mientras cunde el malestar entre los profesionales afectados, el Sindicato recuerda que no fue ni siquiera consultado, por lo que impugará dicha resolución.

El tema de las peonadas ha tenido siempre una trayectoria agridulce. Por un lado, ha facilitado que la empresa sanitaria pública aumentara el rendimiento de determinadas actividades, buscando la disminución de las listas de espera; también permitía el “sobresueldo” de quienes, voluntariamente, cubrían ese tiempo de trabajo extra. Pero ha sido la causante de agravios comparativos entre quienes podían acceder a ellas y quienes, por su especialidad, por no generar lista de espera o por motivos menos claros, no eran llamados a “hacer peonadas”. El Sindicato no ha estado nunca en las “negociaciones” de las peonadas, ya que su carácter local y voluntario hacía que fueran pactadas con distintos servicios, en cada Hospital y con tarifas muy variadas. Y ahora Salud las regula unilateralmente. Es el precio del individualismo negociador. Este formato cabe en un mundo de médicos liberales y autónomos, pero no en una sanidad pública de carácter funcionarial, donde las relaciones laborales están reguladas y sometidas al control y negociación con los legítimos representantes de los trabajadores afectados. Como comentaba uno de los médicos que hasta ahora hacía peonadas: “iremos de 8 a 15, como funcionarios, y sanseacabó”, sin descartar que cesen en la realización de peonadas e incluso dejen de firmar los contratos de gestión.

Colegios y Sindicato Médico rechazan ambas medidas, que no garantizan los niveles de calidad que el sistema sanitario público exige.

La escasez de médicos y la mala distribución de los mismos es uno de los grandes problemas del Sistema Nacional de Salud. Dentro de esa carencia preocupante, la Consejera de Salud de Cataluña, Marina Geli, lanzó ayer una propuesta inédita al ministro de Sanidad en una reunión que mantuvo con él por la mañana: «Posibilitar la contratación de residentes de médicos (MIR) de familia de último año y permitir la contratación de profesionales extranjeros en espera de la homologación del título, debido a la necesidad imperiosa de médicos y enfermeras y también ante el verano». La respuesta, en parte, se la ofreció el Ministro por la tarde en el Congreso: «Vamos a desarrollar el artículo 18 de la Ley de Ordenaciones Sanitarias para reconocer en España los títulos de especialistas obtenidos en la Unión Europea a efectos no académicos, pero sí profesionales». Recordemos que la Sra. Geli jubiló por decreto a más de 400 profesionales médicos para, inmediatamente después, solicitar al Ministerio de Educación que acelerara los trámites para homologar los títulos extranjeros. Como siempre, nuestros políticos toman decisiones sin conocimiento de las situaciones y lo pagamos los demás. Ahora se pretende aumentar, también, el número de estudiantes de Medicina, sin tener tampoco un estudio de necesidades ni a corto ni a medio plazo. Así nos va.

Tras analizar el documento del grupo de expertos del ICOMZ, el Sindicato coincide plenamente en el análisis y las soluciones propuestas

APOYO DEL SINDICATO DE MÉDICOS AL “PLAN DE CHOQUE DE LA AP”

El Sindicato de Médicos CESMAragón, tras considerar atentamente el documento “Plan de Choque” elaborado por un grupo de expertos de Atención Primaria del Colegio de Médicos de Zaragoza, quiere manifestar:
1. Que compartimos íntegramente el análisis que el documento hace de la situación extrema que vive la AP aragonesa.
2. Que conocemos la necesidad urgente de adoptar medidas estructurales, de plantilla y de organización, que eviten nuevas saturaciones en la asistencia sanitaria de nuestra A.P.
3. Que gran parte de esas medidas están ya contenidas en los 7 puntos que el documento propone.

Por tanto, expresamos nuestro apoyo total al citado “Plan de Choque”, que es incorporado a los planteamientos y reivindicaciones de este Sindicato, instando a nuestras autoridades sanitarias a que contemplen, urgentemente, la incorporación de las medidas allí propuestas.

En Zaragoza, a 30 de mayo de 2008.

El 1,2% pendiente se incorporará a la nómina de mayo, excepto para residentes y refuerzos. El sindicato preparará reclamaciones para estos colectivos caso de no regularizarse su situación.

Después de haber sido la primera organización en avisar del futuro déficit de médicos, la CESM siempre ha abogado por un incremento responsable del numerus clausus en relación con los datos que se vayan conociendo en cada momento sobre la necesidad de profesionales.

El Comité Ejecutivo de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), reunido hoy en Madrid, ha decidido mostrar su público apoyo a los estudiantes de Medicina en la oposición que mantienen a que se creen nuevas Facultades sin que previamente se haya justificado su necesidad en base a un estudio riguroso de las necesidades sanitarias y docentes de nuestro país.

En este contexto, la creación de nuevas Facultades, con el incremento exponencial que ello lleva aparejado en el numerus clausus, está fuera de toda responsabilidad política.

Además, la proliferación de Facultades no hará sino dificultar los ajustes a la baja que serán necesarios en el futuro si queremos evitar la sucesión pendular que se ha producido hasta la fecha por la falta absoluta de planificación.

Ante tal situación, la CESM coincide con el planteamiento del Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM) y apoya las movilizaciones que este colectivo pueda plantear al respecto.

En Zaragoza, habrá una concentración de batas blancas a las 12 h. del día 29 de abril ante la Facultad de Medicina.

Se manifestarán en Zaragoza el 29 de abril en la puerta de la Facultad a las 12 h. Consideran que, sin un estudio previo y riguroso que justifique las necesidades reales, podríamos llegar a otra plétora de médicos como la de los años 80.

El Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina (CEEM)decidió esta postura en asamblea general el pasado día 9. En su comunicado, establecen lo que deben ser los criterios del estudio de necesidades de médicos y las características que han de cumplir los incrementos de estudiantes que fueran necesarios.