Por tanto, la ENTREVISTA no se recoge expresamente en la Resolución, pero, según Salud, tampoco nada la impide en su redacción. Salud justifica esta entrevista por OPERATIVIDAD, ya que permite aclarar dudas sobre el proyecto, fundamentalmente, con el interesado delante; también por OBJETIVIDAD ya que entienden que así pueden conocer de primera mano la opinión del interesado ante determinadas cuestiones que pudieran plantearse.
La opinión técnica de nuestra Asesoría Jurídica es que,
1-por una parte, la entrevista no está contemplada en el procedimiento de evaluación de los Jefes que ya tuvieran nombramiento a la entrada en vigor de esta Resolución (reevaluación); pero sí se recoge minuciosa y expresamente el procedimiento de evaluación de los nuevos jefes (Octava), por lo que debemos suponer que podría estar igualmente detallado el procedimiento para la reevaluación si así se hubiera considerado necesario.
2-pero, por otro lado, la entrevista supone una forma más “garantista” para el entrevistado que la mera remisión de la memoria y el proyecto para su lectura por la Comisión Evaluadora y es cierto que permite solucionar dudas sin remitirse a nuevos plazos de corrección o subsanación. Eso hace que no parezca viable plantear un pleito por la mera existencia de la entrevista.
3-otra situación, bien distinta, sería que el aspirante fuera excluido del proceso (no renovado como Jefe) por no haber asistido a la entrevista, en cuyo caso sí habría razones para impugnar el proceso al no estar determinada la citada entrevista como hemos señalado.
Las entrevistas que se están llevando a cabo estos días en los diferentes hospitales aragoneses muestran una gran diversidad de situaciones, desde las más habituales, entrevistas entre compañeros, cordiales y educadas, hasta aquellas en que la Dirección aprovecha para abroncar al Jefe con el que no tiene sintonía, pasando por otras muchas en las que los aspirantes aprovechan para reivindicar las necesidades de los Servicios.
En todo caso, ésta es la versión “amable”. La dura vendrá en las nuevas Jefaturas, con tribunales donde cinco de sus siete miembros lo serán a instancias de la Administración. Como ya dijimos al Salud, si se trata de hacer puestos de libre designación, vale más decirlo claramente que montar un paripé.